Lona Decorativa Caballero Medieval Épico

El caballero medieval se erguía con majestuosidad, enfundado en una armadura que relucía bajo el sol. Su porte era imponente y lleno de dignidad, su mirada severa y decidida. La armadura cubría cada centímetro de su cuerpo, protegiéndolo de las flechas, lanzas y espadas que pudieran venir en su contra.

El yelmo, tallado en acero, cubría su rostro, dejando únicamente al descubierto sus ojos, que brillaban con una determinación feroz. En su cuello, una cota de malla, tejida con anillos de hierro, lo protegía de las estocadas y cortes más feroces.

El peto y las hombreras, forjados en hierro y adornados con grabados de animales mitológicos, le proporcionaban una defensa extra, mientras que los brazales, los guanteletes y las grebas, completaban su armadura, protegiendo sus extremidades.

El caballero llevaba también una capa, que caía por detrás de sus hombros y le confería un aire de nobleza y autoridad. En su cintura, llevaba una espada, forjada en los fuegos más calientes de la fragua, con una hoja afilada como una navaja y una empuñadura decorada con piedras preciosas.

Con su armadura y su espada, el caballero parecía un ser mítico, un guerrero de leyenda, invencible e imparable. Pero no era solo su armadura lo que lo hacía poderoso, sino su porte, su aura de valentía y honor, que lo convertía en un líder respetado y admirado por todos los que lo rodeaban. Con su mirada y su postura, demostraba que estaba dispuesto a luchar y a morir por su causa, sin importar cuál fuera el costo. Y así, avanzaba hacia la batalla, como un verdadero héroe medieval, dispuesto a escribir su nombre en la historia de su pueblo.

• 100% poliéster
• 142 x 88 cms
• Tejido de punto
• Peso de la lona 240 grs
• Impresión en un lado
• Reverso en blanco
• 2 arandelas de acero
• Componentes del producto base procedentes de China e Israel